Thursday, September 26, 2013

Días de nada (IX)

La prisa le había hecho salir de su casa descalzo y pensó que lo mejor que podía hacer era regresar y curarse los pies. De camino su única preocupación era la de no encontrarse con algún vecino que viese que iba con ellos desnudos y sangrando. 
Cuando llegó se dio cuenta de que se había dejado la puerta abierta y al entrar escuchó como por la radio antigua que usaba a diario salían las notas de una canción de Ray Charles que le acompañaron al cuarto de baño.
Se lavó los pies, se aplicó yodo en las heridas y después unas vendas en las zonas donde las erosiones habían sido más profundas.
No sabía en qué dar, sentía una desazón que ni el segundo Dr Pepper pudo calmar. Abrió un viejo álbum que había comprado en una tienda de antigüedades y se puso a ver cada una de las fotos, y a inventar una historia que las uniera a su vida. Igual que aquella instantánea enmarcada de la mesilla de su habitación, la que había comprado en un mercadillo y que para él hacía la función de madre.
Empezó a sentirse como en aquellos días en los que bebía demasiado, no se hallaba. Se calzó con cuidado, cerró la puerta a conciencia y cuando estaba metiendo las llaves en el bolsillo se dio cuenta de que se había dejado la radio encendida otra vez, pero no le importó. No podía quedarse más en casa, no podía...
(continuará...)
Mr. Blue